«Una caricatura (del italiano caricare: cargar, exagerar) es un retrato que exagera o distorsiona la apariencia física de una persona o varias, en ocasiones un estrato de la sociedad reconocible, para crear un parecido fácilmente identificable y generalmente con tendencia política.
Los artistas que dibujan caricaturas se llaman caricaturistas, la acción es hacer caricaturas.
Las caricaturas son una forma gráfica de la sátira que pretende ser una crítica partidaria de los valores existentes o de la situación política y se usa con frecuencia como «arma» en disputas sociales.
La caricatura exagera y distorciona los rasgos característicos de personas y acontecimientos, mediante el contraste con la realidad, con el objetivo de despertar la reflexión en el espectador. Muchas veces la caricatura trata con sarcasmo e ironía una situación de actualidad.
La caricatura descubre las deficiencias esenciales de la persona representada (p.ej. de un político) o del objeto o acontecimiento representado y provoca la risa del espectador mediante el dibujo.
La caricatura puede ser sátira o más bien humor. Esto depende de si el autor está en contra de su «víctima», sólo quiere que la gente se ría de ésta o únicamente quiere comentar algunas deficiencias con ironía fina (dibujo humorístico).
La interpretación de caricaturas procede en los siguientes pasos:
1. informarse, 2. describir, 3. explicar y 4. resumir.